Las
facilidades que ofrece a los cubanos la llamada Ley de Ajuste Cubano
contrastan con la realidad que viven los emigrantes guatemaltecos,
hondureños y salvadoreños que viajan rumbo a EE.UU.
PANAMÁ, diciembre 30.— La llegada de migrantes cubanos a América Central en su tránsito hacia EE.UU., ha dejado la impresión en el istmo de que existe una migración de primera clase, la de los cubanos, y otra de segunda, la centroamericana, comenta EFE.
El hecho de que los cubanos que toquen suelo estadounidense puedan quedarse legalmente en ese país gracias a la política de pies secos-pies mojados y a la llamada Ley de Ajuste Cubano, vigente desde 1966, contrasta con la realidad de los miles de guatemaltecos, hondureños y salvadoreños que salen cada mes rumbo a EE.UU. en medio de la incertidumbre de si llegarán y, de lograrlo, si podrán permanecer y cuánto tiempo.
Esa situación ha quedado evidenciada, y ha sido incluso reclamada, con la llegada de alrededor de 8 000 migrantes cubanos a Costa Rica, que no pudieron seguir su viaje irregular por Centroamérica, un fenómeno que la agencia noticiosa vincula al deshielo entre EE.UU. y Cuba, que iniciaron hace poco más de un año un histórico acercamiento, porque asume que hace pensar que más temprano que tarde será derogada la política de pies secos-pies mojados que beneficia a los isleños.
«La pequeña crisis de los migrantes cubanos ha destapado varias cosas: sensibilidades centroamericanas (...), las debilidades del SICA como sistema de integración», dijo este miércoles a EFE el ex embajador de Panamá en México y Belice, Nils Castro.
La situación parece haberse solventado, al menos parcialmente, con el acuerdo alcanzado el lunes en Guatemala por los países del SICA y México, de realizar en enero próximo un primer traslado de los cubanos en Costa Rica, hacia El Salvador, vía aérea, de donde seguirán por tierra hacia México.
Panamá dijo este miércoles que negocia con sus vecinos para que los mil cubanos que están en su territorio también puedan seguir por alguna ruta su camino hacia el «sueño americano».
«Hay por lo menos un doble rasero: hay migrantes de primera clase y de segunda clase», afirmó Nils Castro, al comparar la situación de la migración cubana y la centroamericana.
Gracias a la política estadounidense de pies secos-pies mojados, los cubanos «van con la bendición divina de que nadie pone en duda de que sí van a poder entrar y establecerse en EE.UU.», argumentó.
Pero los centroamericanos, especialmente los guatemaltecos, salvadoreños y hondureños, «van a su riesgo», con la incertidumbre de «si pueden cruzar la frontera, y si, de cruzarla, pueden quedarse» en EE.UU., resaltó el diplomático panameño.
La economía de esos tres países centroamericanos, azotados por una elevada pobreza y violencia vinculada con las pandillas y el narcotráfico, depende en gran medida de las remesas enviadas desde Estados Unidos.
Ese contexto explica la clara posición de Guatemala, cuyo presidente Alejandro Maldonado, pidió el pasado día 22 suspender la Ley de Ajuste Cubano, que beneficia a unos pocos, o en su defecto, ampliarla «para todos».
El Gobierno de Guatemala «expresó un sentimiento generalizado en Centroamérica. Todos los migrantes centroamericanos son tratados con extremada dureza en México y también en EE.UU.», opinó Nils.
Argumentó que la cifra de 9 000 cubanos ahora en Costa Rica y Panamá «palidece» frente al número de deportados guatemaltecos, hondureños y salvadoreños desde México y EE.UU.
Hasta la primera semana de este diciembre unos 65 749 hondureños indocumentados fueron deportados desde México y Estados Unidos, según datos del Gobierno de Honduras, mientras que Guatemala cifró en al menos 92 284 sus nacionales deportados entre enero y noviembre pasado (otras fuentes hablan de 104 000 guatemaltecos en esa situación).
«En los últimos años, México está deportando con severidad a los migrantes centroamericanos. En el año fiscal que acaba de terminar México deportó más centroamericanos que EE.UU.», aseveró.
Fuente Juventud Rebelde
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Por favor, espera para ver tu comentario que sea autorizado, no queremos ofensas acá...