Yo solo quiero saludarle,
Comandante.
¿Acaso es posible que se marche
el alma de un pueblo
del corazón de los sueños?
¿Acaso sea posible que el olvido
tenga más estatura
que la vida hecha camino?
Yo solo quiero saludarle,
Comandante.
¿Acaso el enemigo podrá levantar
muros de silencio
entre tu palabra y el destino?
¿Acaso tiene abandono
el empeño de una tierra
en ser hombres, en ser libres?
Yo solo quiero saludarte,
Comandante.
Aunque se llenen los diarios
de augurios funestos
y proclamas altisonantes.
Aunque los depredadores
afilen sus dientes
y hagan pactos con la muerte.
Yo solo quiero saludarle,
Comandante.
1 comentario:
He puesto un enlace a Cubacoraje desde el blog ISLAMIA. Saludos afectuosos, norelys
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