Cuba coraje: Dichos, refranes, frases hechas… por Rosa C. Báez

Recuerdo, en mis juveniles años de estudiante en la Escuela Nacional de Técnicos de Bibliotecas, haber estudiado -con una de las mujeres más inteligentes que he conocido, la Profesora MaríaLuisa Antuña, a quien la muerte nos arrebatara hace ya algunos años- los refranes, proverbios y dicharachos que nos vienen, no sé si en la sangre o en los genes, de nuestros ancestros de la Madre Patria.

Recuerdo de aquellas clases uno muy especial, aquél de “Bien vengas mal, si vienes solo”, que la profesora debió explicarnos, ante nuestra juvenil ignorancia para descifrar profundidades psicológicas o filosóficas… y cuya aplicación en estos días de destrozos meteorológicos, veo evidente y perturbadora… No sólo nos asolaron de forma inclemente, en muy breve lapso de tiempo, dos fuertes huracanes, si no que hemos sido ofendidos por la supuesta “magnificencia” del imperio, y para mayores disgustos, hemos de oír las mentiras y tergiversaciones de sus lacayos dentro y fuera de Cuba…

Pero volvamos a las remembranzas de marras: entre los dicharachos, refranes y frases hechas que hemos oído alguna que otra vez, asalta y agrede nuestros oídos aquello de “esta juventud está perdida”, con la que algunos, frustrados por su pérdida o haciendo causa común, a veces sin darse cuenta, con los maldecires del imperio, pretenden definir a nuestros jóvenes…

Ayer la recordaba, cuando transitando por una de las tantas avenidas citadinas, sorprendía ingiriendo su modesto condumio a un grupo de jóvenes, casi imberbes, que almorzaba luego de contribuir en la limpieza y retirada de escombros de la calle, lo que demostraba –a ojos vista- un enorme camión repleto de gajos y cascajos… Y recordé un artículo que publicara el Periódico Venceremos digital, haciéndose eco del trabajo de una brigada de soldados del Batallón ingeniero de Guantánamo:

“Uno de los soldados, Wilmeidi Lobaina Rives, manifiesta: “Es mi deber, no solo como soldado, sino como cubano, contribuir en las labores de recuperación, luego de los azotes del huracán. “Incluso -prosigue-, es hasta un honor ayudar a que otras personas recuperen sus casas, algo muy importante que ellos perdieron. Esto también es una labor social”.

“Es un derecho de todo cubano participar, de una manera u otra, en estas labores” –tercia el soldado Lisandro Gámez Cuza- “Soy natural de Baracoa, de manera que para mí es algo muy especial estar en Nibujón y ayudar a las personas de aquí. Por el bienestar de los demás y por mi Revolución hago lo que sea necesario”.

“Hablen de ellos en Alacranes y Bermejas” dicen los vecinos de esa zona refiriéndose al joven soldado Ulises Romillo, y al también joven Jefe de Sector de la zona: “Aquí no se ahogó ni un gato ni nadie se hizo un arañazo, gracias a ellos en buena medida" reseña la crónica del periodista Ventura de Jesús “Después del susto” publicada el 15 de septiembre en el periódico Granma.

Y son esos mismos jóvenes cubanos aquellos de quienes nos habló hace sólo unos días uno de ellos, Joel Queipo Ruiz, miembro del Buró Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas, cuando nos informaba que “Miles de jóvenes están movilizados en todo el país desde hace dos semanas, para participar en las labores de recuperación después del paso de huracán Ike”

“También informó que ahora organizan brigadas de apoyo a la agricultura para la cosecha del café y del tabaco, el aseguramiento de la zafra azucarera y la atención a los cultivos varios.

A todo ello debe sumarse el aporte de los jóvenes pertenecientes a las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y al Ministerio del Interior (MININT), quienes desde el principio se incorporaron a las tareas más inmediatas, y los trabajadores eléctricos que acudieron a diversas partes de la Isla”. [1]

“Miles de jóvenes cubanos se incorporaron hasta el 6 de diciembre próximo al cuidado ambiental de cada rincón del país, luego de los serios daños de los huracanes Ike y Gustav. La convocatoria de las Brigadas Técnicas Juveniles y la Red Ambiental Juvenil de Cuba pretende devolverle a la isla la belleza natural perdida y también la utilidad y productividad del medio ambiente. […] “Los organizadores de la campaña insisten en que esas condiciones hacen necesario que la juventud, junto al pueblo, se integre a todas las tareas de rescate del entorno, en función de la utilidad y productividad del medio ambiente.” [2] Por que estamos conscientes de que la juventud ha sido y es, baluarte indispensable para el devenir histórico de la Revolución…

“Los jóvenes cubanos tienen una participación creciente en el proceso económico y social que vive la isla”, decía el periodista Roberto Morejón al hablarnos de los trabajadores sociales, y señalaba “En ese contexto los jóvenes cubanos ocupan un lugar de avanzada como lo demuestra el papel que juegan los trabajadores sociales, que hasta un número de 28 mil se formaron aceleradamente en el nuevo milenio para atender, en primera instancia, a las personas más vulnerables socialmente hablando, sobre todo niños, jóvenes y ancianos” [3]

En el acto nacional por la segunda graduación de Instructores de Arte, el 28 de octubre de 2005, decía nuestro Comandante en Jefe:

“Es fabuloso el camino que se abre hacia la formación de sensibilidad y apreciación de las artes entre los más jóvenes y hacia el ambicioso propósito de crear una cultura general integral masiva en nuestro pueblo” […] “estos jóvenes que son ya una fuerza imprescindible en la batalla colosal por lograr una cultura general integral en nuestro pueblo”. “Si de los jóvenes que iniciaron el primer curso de estas escuelas solo el 7% había recibido alguna formación previa, ahora el 41% de los nuevos ingresos en este curso escolar ha estado vinculado al arte a través del movimiento de aficionados, ha sido preparado por un instructor o proviene de las Escuelas Vocacionales de Arte.” […] “Cumpliendo el principio de justicia e igualdad que inspira nuestra obra, se ha facilitado desde la creación de las escuelas el ingreso de jóvenes discapacitados, para los cuales se han realizado adecuaciones en los planes de estudio que les permitan vencer los objetivos sin disminuir la calidad de su formación.” [4]

En los primeros meses de este año “de nuestras más altas metas”, (como reza el slogan que en el Hotel Meliá Habana anima a la superación personal y a la calidad en el desempeño de sus trabajadores) nos anunciaba el periódico insignia de nuestra juventud: “Un total de 45 jóvenes que han sobresalido en la actividad científica como investigadores, tecnólogos y estudiantes, fueron reconocidos este sábado con el premio que anualmente otorgan el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), la Academia de Ciencias, el Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Ciencia y las Brigadas Técnicas Juveniles (BTJ) a los más destacados del país. […] Dayamí González Cruz, directora de Recursos Humanos del CITMA, reveló que suman ya 268 jóvenes los galardonados en las siete ediciones del premio. De ellos –dijo- más del 60 por ciento provienen de provincias no habaneras, lo que refleja la extensión de la obra educacional de la Revolución a lo largo de todo el país.” [5]

La Asociación Hermanos Saíz (que agrupa a los jóvenes creadores cubanos) “ha emprendido giras por diferentes localidades para llevar su arte a los damnificados por el paso del huracán Ike y también a otros centros en los que se encuentra fuerza joven que interviene en la recuperación. La respuesta ofrecida por los jóvenes camagüeyanos ante esta situación creada en todo el país no es casual; es el resultado de una rica historia que atesora momentos muy especiales en que el espíritu de combate de las nuevas generaciones se agiganta para acompañar a la Revolución.

Pero, ¿sólo en estos heroicos días ha hecho historia la juventud cubana?

En discurso conmemorativo del 3 de diciembre de 1961, en que se recordaba la muerte de 8 estudiantes de medicina brutalmente inmolados por el Gobierno español que dominaba la Isla de Cuba en las postrimerías del Siglo XIX, Ernesto Guevara, que desde muy joven supo hacer historia y que forma parte en efigie, en sentimiento y en ejemplo del cotidiano de vida de los jóvenes cubanos, decía:

“Y quizás allí fusilaron a algún Martí en ciernes, fusilaron a algún gran patriota; de todas maneras, aniquilaron ‘cachorros de bandidos’, y tenían razón, porque eran muy jóvenes los hombres que en ese momento estaban luchando contra el poderío español, y tenían razón, porque los niños de 15 años, cuando hay de por medio una revolución, no son niños ¡sino que son soldados de la patria! Tenían razón, porque el jefe de los Jóvenes Rebeldes, el compañero comandante Joel Iglesias, cuando ingresó en nuestro Ejército Rebelde, pocos días antes del combate del Uvero tenía a penas 15 años, y porque 15 años es una edad donde ya el hombre sabe por qué va a dar la vida, y no tiene miedo de darla cuando tiene naturalmente dentro de su pecho, un ideal que lo lleva a inmolarse”.

Un joven Martí que arrastró cadenas, sufrió destierro, y creyó en la causa de la revolución… Joven, muy joven, era Julio Antonio Mella cuando junto a sus mayores conformó el Primer Partido Comunista de Cuba; joven José Antonio Echevarria cuando al frente de otros jóvenes protagonizaran una de las hazañas más audaces realizadas en nuestras luchas por estudiantes universitarios, el Asalto al Palacio Presidencial…

Y jóvenes fueron aquellos que como dijera Fidel en su alegato “La Historia me absolverá” “vinieron a morir junto a su tumba, a darle su sangre y su vida para que él [José Martí] siga viviendo en el alma de la patria”. […] “Para los jóvenes de la Generación del Centenario existía una razón muy poderosa, eran cubanos y eso implicaba un deber, no cumplirlo era un crimen y traición”. [6]

No, no está perdida la juventud… Y si no, que le pregunten a Segismundo, lector habitual del Periódico Vanguardia, de Villa Clara, que en uno de sus Foros, escribió el 19 de marzo de este año:

Quienes ven la juventud
como una cosa perdida,
no se acuerdan que en su vida
sufrieron tal actitud.

Yo confío en la virtud
de jóvenes aguerridos,
en los pasos encendidos
del tiempo, y seguro estoy
que los jóvenes de hoy
no estamos nada perdidos.

Página digital de la revista Somos Jóvenes / “Laboran jóvenes cubanos en la recuperación del país”, http://www.somosjovenes.cu/index/semana113/jovrecup.htm

2. Prensa Latina / Jóvenes cubanos interesados en recuperación ambiental http://www.prensalatina.com.mx/article.asp?ID=%7BE3C63C54-836E-44FC-B9F0-4A1DE52275D2%7D&language=ES

3. Idem / Jóvenes cubanos en primera fila, por Roberto Morejón

http://www.somosjovenes.cu/index/semana10/trabsoc.htm

4. Fidel Castro Ruz. Discurso pronunciado en el acto nacional de la segunda graduación de instructores de arte, en la Ciudad Deportiva, el 28 de octubre de 2005.

http://www.cuba.cu/gobierno/discursos/2005/esp/f281005e.html