Ladrones mal ubicados, por Arena del Río

Seguramente pocos se acuerdan del gran escándalo generado en Miami y divulgado en Madrid, como si fuera un asunto nuestro, de que varios estafadores y ladrones del sistema de salud pública de esa ciudad estaban refugiados en La Habana, bajo la protección de las autoridades “Castrocomunistas”.

Sin embargo lean esta noticia, publicada de forma miserable, sin darle casi divulgación:

"Uno de los cubanos de Miami perteneciente a una organización delictiva acusada por las autoridades federales norteamericanas de robarse varios millones de dólares del Sistema de Salud fue arrestado en el pueblo de Heredia, en la república centroamericana de Costa Rica.

"El cubano exiliado arrestado en Costa Rica se llama Pedro Luis Rodríguez Sosa que estaba requisado por la Interpol acusado de robarse once millones y medio de dólares del programa de salud conocido como el Medicare.

Según el informe policíaco el individuo formaba parte de un equipo de 13 personas que organizaron un fraude calculado en más de 100 millones de dólares que tenían inversiones en República Dominicana y en Costa Rica país donde reside desde hace años otro exilado cubano a quien se le conoce por “El Maestro” no porque se dedique a la enseñanza magisterial sino porque entre los ladrones del Medicare es considerado como el maestro en ese tipo de estafa al sistema de salud de Estados Unidos.

“El Maestro” vive desde hace años en Costa Rica país donde su padre, el ex comandante del Ejército Rebelde, Huber Matos, exiliado en Miami, tiene allí en San José muy buenas conexiones políticas que le han servido para la protección a su hijo a quien las autoridades norteamericanas reclaman por sus robos al Medicare."

Las noticias se divulgan como les interesa a los dueños de la información.

Según estudios recientes los EEUU, la Unión Europea y Japón controlan el 90% de la información de todo el planeta. 5 agencias de países enriquecidos distribuyen el 96% de las noticias en el mundo. En América Latina, 90 de cada 100 palabras de información proceden de 4 agencias de países del Norte.

El Sur es modelado según los intereses del Norte. La fijación de un “pensamiento único” impuesto desde las élites económicas y políticas mundiales redunda en la concepción de un único mundo posible, con un único sistema económico viable. Y los países empobrecidos o del Tercer Mundo sufren una evidente paradoja: la información que les sirve para entender el mundo es fabricada en los mismos centros de poder económico y político responsables de su saqueo y su dependencia.

Seis grandes grupos empresariales, 4 de ellos de EEUU y 2 de Europa, concentran las principales cadenas de televisión, emisoras de radio, periódicos, revistas, editoriales, productoras de cine, agencias publicitarias, discográficas y otras empresas de comunicación. Son los gigantes de la comunicación, poderosas maquinarias en manos de una élite económica, que ejercen el control mundial de la información y son creadores de matrices de opinión pública, patrones de conducta, valores y estilos de vida. Este reducido y selecto club ofrece una información homologada y uniformada coincidente con una visión del mundo que legitima sus intereses.